Si me ves partir... agita el pañuelo

Es curioso que con el paso del tiempo, la promoción del video clip y el aumento de visitas al mismo (yo diría que importante, para una banda casi en ciernes como esta) uno finalmente se quede con los detalles, y cuando digo uno me refiero más al foráneo "video vidente" que al músico protagonista. En los últimos tiempos he oido tantas repetidas alusiones al pañuelo con el que salgo en el lado más "salvaje" de las ambivalentes actuaciones que he optado por escribir en tal sentido, explicando los motivos no casuales de su aparición y reafirmando con ello, que todo detalle tiene un sentido (aunque interno y personal) en el video clip dirigido por Rebeca Puig. De todos es sabido que el video conjuga dos formas diferentes de entender a la banda que casan perfectamente con las dos caras de la moneda a las que se refiere la canción: el lado más acústico, country y de trajes planchados, que es el lado izquierdo, el del angelito (sin entrar en vicisitudes políticas, que no las hay); y el lado más rockero, revestido de arrugado cuero, fuego y electricidad, el lado del diablo que todas y todos llevamos dentro. Sobre esas dos imágenes, fiel reflejo de la canción y de la música de Despreciables, construimos con la ayuda de grabaciones propias de nuestro día a día, la esencia de esas imágenes que abrazan el tema "Prefiero a Satán". Pero además, por otro lado, esta canción es una deuda que tenía pendiente, habla de un concierto que hace muchos años hizo, mi entonces banda (La Sonrisa de Satán, en la foto de grupo) y los catalanes Desbocados, un concierto que simbolizó un auténtico hermanamiento que los barceloneses inmortalizaron con su "1000 km." temazo de línea country rock de su primer trabajo. El tiempo no me había dado la oportunidad de devolver, como buen caballero, tamaño guiño y es ahora cuando la oportunidad llamó a mi puerta y este tema es un abrazo a mis amigos (extensible a banda y entorno) con un lema claro ("seré un DESBOCADO"), pero además es una declaración inmortal de principios a la familia que dejé atrás, a la de MI Sonrisa de Satán, por los años, kilómetros y sueños vividos. Por ellos el título, Prefiero a Satán, a La Sonrisa, y por ello me colgué al cuello el pañuelo que solía colgar del "palo" del micro (ver foto, aunque se aprecia pequeño y esquinado) en los conciertos de la banda por aquel entonces. Porque yo también, al despedirme, agito el pañuelo...

Charly "Alley"